Recién estaba navegando por un sitio que tocaba el tema de un falso profeta, un tipo que se hacia pasar por Jesús y luego por el Anticristo. Al final el articulo se diluía en una critica a las religiones protestantes, lo que me motivó a escribir sobre el viejo debate acerca de la necesidad de los seres humanos de contar con una religión.
La verdad, la forma en que nosotros percibimos la realidad es muy pobre, muy limitada. Nosotros conocemos a partir de nuestros sentidos, y estos son imperfectos. A modo de ejemplo, la clásica alegoría de cinco hombres ciegos -y probablemente sordos- que usando sus sentidos disponibles -el tacto, y omitiremos el gusto- intentaban describir como era un elefante. Obviamente el que tomo la cola creyó que el elefante era como una lombriz, mientras que el que tomó la trompa creyó que era como una boa. De la misma manera el que tomo los pies pensó que era como un árbol, el que tomó su panza lo describió como redondo y enorme, y el que tomó las orejas lo asimiló a aquellas plantas de grandes hojas. En definitiva estos cinco sabios (dicen que eran seis, pero no se que otra cosa podría haber agarrado el sexto asi que mejor lo dejamos ahí) usaban sus limitados sentidos para percibir la realidad y nosotros podemos deducir lo errados que estaban.
Ahora, nosotros que contamos con los cinco sentidos no podemos jactarnos de lo que sabemos, pues hay muchos aspectos de la realidad que no percibimos. Nuestra visión y nuestros oídos perciben en un espectro muy limitado. No percibimos la temperatura de las cosas con la vista, no percibimos ruidos por sobre ciertos rangos, solo con eso debería quedarnos claro que vemos y oímos muy poco. Y eso debería deprimirnos.
Cuando nos enfrentamos a nuestros limites siempre miramos al cielo y lamentamos lo que no podemos conocer, pero en realidad aquí solamente en la tierra no conocemos nada. ¿Conoces tu a tu colega? No, solo conoces lo poco que has visto de el o ella. Para conocerlo completamente deberías vivir su vida junto con el, desde que nace hasta que muere y eso aun así no bastaría. Y en cuanto al mundo que nos rodea, los volcanes, las estrellas, la vida y la muerte y más allá, lo que pasa con los muertos, son un misterio para el que no tenemos explicación.
Entonces surgen las religiones, que son una forma de explicarnos aquellas cosas para las que no existe explicación posible, y una forma de comunicarnos con entidades superiores, que rigen nuestro destino.
Nuestra enorme necesidad de racionalizar todo nos obliga a buscar excusas cuando la razón no es suficiente. ¿Porque me ocurren tragedias si me porto tan bien? Porque Dios me está probando. ¿Porqué existen los truenos? Porque Dios está recordando a los hombres su poder. ¿Porque estalla el volcán? Porque el dios del fuego está castigando a los aldeanos. ¿Qué pasa con la gente que yo quiero después de que muere? Se va al cielo y los volveremos a ver. Curioso, nosotros hablamos mucho del cielo de los perritos a modo de consuelo para nuestros hijos, y aunque sabemos que es mentira, sabemos también que es un excelente método para que ellos enfrenten la pena por la muerte de sus mascotas, al menos hasta que estén lo suficientemente fuertes para enfrentar la verdad. ¿Cuándo estaremos nosotros lo suficientemente fuertes para saber la otra verdad?
La religión permite a los seres humanos no perder la cordura ante el enorme vació que nos rodea, del cual nunca tendremos información. Afrontemoslo: tenemos las mismas probabilidades de saber el origen y características del universo que las que tiene una célula de saber la historia de nuestras vidas. Pero ¿Podemos comunicarnos con este universo, o más bien, podemos saber cuándo estamos en armonía con el? Personalmente creo que si, al igual que una célula sabe cuándo está cumpliendo correctamente su función dentro de nuestro cuerpo.
Y creo que la religión nos permite acercarnos a este buen proceder.
La religión nos permite entrar en comunión con ese "algo allá afuera". Aunque es cierto que existen religiones atroces que se basan en el odio y la intolerancia, cabe preguntarse si no estarán cumpliendo una función dentro de la biología cósmica. Como fuere, yo siempre opto por las religiones que nos permiten estar en armonía entre nosotros. Lamentablemente esta armonía es para los que están dentro de la religión. En el caso de la religión cristiana -la mia- es innegable los excesos producidos por la inquisición, y las guerras desarrolladas en Las Cruzadas, dentro de otros tantos ejemplos. Es innegable también como las variantes del cristianismo se alejan de su texto sagrado a medida que pasa el tiempo. La humildad de Jesús no siempre es vista como un ejemplo a seguir por parte de sacerdotes y seguidores.
Y como en otros aspectos, en la religión el poder también corrompe, porque el poder que puede reunir un sacerdote en una comundad le permite abusar de ella si lo desea, no solo a través de una explotación económica, sino hasta sexual o política.
Sin embargo el rol que tiene la religión como una forma de preservación de la especie y de las costumbres es enorme. La necesidad de contar con una explicación de lo inexplicable es comprensible como algo inconsciente de la humanidad, pero la coincidencia entre los reglamentos de cada religión y la mantención de costumbres dentro de un determinado pueblo deja mucho que pensar, sobre todo porque tiende a preservar su existencia. No Mataras por ejemplo, No Desear la Mujer de tu Prójimo, Honrarás a tu Padre y a tu Madre, etc. son parte de los diez mandamientos que en la religión cristiana fueron entregados directamente de Dios a su gente por medio de Moisés. Da para pensar que manos invisibles arreglaron un poco los lineamientos del Cristianismo -y de muchas otras religiones mas- para que además de dar consuelo y de explicar lo inexplicable sirva para algo más. Ahora mismo recuerdo que algunas versiones de la muerte de Jesús dicen que ello fue algo orquestado por los Fariseos para evitar la masacre que sería una rebelión en masa de los judios contra los romanos. Versiones sustendadas por pasajes como Dar al Cesar lo que es del Cesar, o Poner la Otra Mejilla, derechamente contradicen lo expuesto en el antiguo testamento, donde Dios no era conocido como un Dios de Amor sino como Jehová de los Ejércitos, que apoyaba la expansión militar de Israel.
Las religiones son consideradas absurdas por algunos pensadores modernos, que dicen que el hombre debe labrar su destino en base a la razón y no a la fe en algo que no ve y que no puede comprobar que existe. Es decir, creer en lo que ven mis ojos solamente. Pero eso también es discutible.
Según este esquema la ciencia también es una religión, porque nos permite conocer cosas que no tenemos como conocer. ¿Como sabes tu que las neuronas experimentan un proceso de transmisión de información llamada Sinapsis? Porque te lo contó alguien autorizado: un sacerdote-científico, que está en permanente comunión con la fuente del saber a la que tu no tienes acceso por miles de motivos. Claro, este sacerdote-científico no recibe el conocimiento por un toque místico como otros sacerdotes, sino que hace una investigación mediante instrumentos o mediante lo que escriben otros sacerdotes-científicos quienes cuentan con el respaldo de otra comunidad de sacerdotes-científicos llamadas academias, universidades, comités, etc.
Y por supuesto, como toda religión, esta información es incuestionable. Sino, pregúntate:
-¿La tierra es redonda? Por supuesto, hay formas de medirla, hay formas de comprobar su curvatura. ¿Las conoces? No, pero has leído de gente que lo ha hecho y comprobado. Es más, hay fotografías desde el espacio. ¿Las tomaste tu? no, pero las tomaron otras personas, astronautas. ¿Los viste haciéndolo? No, pero he visto reportajes sobre ello, he leído artículos de otras personas.
¿Cuántos pobres hay en Chile? ¿Los contaste? no, no podrías hacerlo. Si lo sabes probablemente lo leíste en un estudio. O sea, estas creyendo ciegamente en lo que escribió otra persona. Puede que hayas colaborado en ese estudio, e incluso, puede qe hayas procesado los datos que te entrego otra persona, aunque eso yo no tengo como saberlo, solo puedo creerte.
Es imposible que lo puedas ver todo o que puedas comprobar todo, por lo que para conocer algo tenemos que trabajar en equipo, dejar que otros hagan el trabajo de comprobar por mi - los sacerdotes-científicos por ejemplo -y yo mientras debo tener la suficiente fe. para creer en ellos. Es imposible que todos estén confabulados para hacerme creer una mentira.
Pero ¿Es imposible o poco probable?
Miremos la historia. Miremos las dictaduras, cuando el grupo que esta en el poder omite información para mantener a la población calma y engañada. Miremos a los triunfadores como reescriben la historia. Ante un conflicto bélico entre países vecinos veamos los motivos que tiene cada uno y lo que les hace creer a su gente.
Miremos las pocas pasadas, cuando se creía que la tierra era plana y que mas encima era el centro del universo, comprobado por científicos de la época.
Solo sé que nada sé, decía un viejo filosofo sabio.
Tal vez esa sea la lección más valiosa que tengamos.
Y luego tal vez las religiones no nos parezcan tan absurdas después de todo.
Tu Opinólogo de Cabecera